EN COLOMBIA, PRIMERA CIRUGÍA ROBOTICA EN GINECOLOGIA:
Con DA VINCI se pueden desarrollar cirugías robóticas de alta Precisión
en afecciones ginecologicas como miomas, Endometriosis, quistes, cáncer o
infertilidad.
• La clínica de MARLY pone al servicio de las mujeres
colombiana el último avance Médico en cirugía robótica que se registra en el
mundo: DA VINCI, un robot capaz De
asistir cirugías ginecológicas con la máxima seguridad para las pacientes al Permitir
mayor precisión en los movimientos y ofrece mejor acceso y visualización De los
órganos Intra abdominales mediante un sofisticado sistema de video que Proyecta
la imagen en tres dimensiones
• En estados unidos se realizan
aproximadamente 600 mil cirugías anuales de Histerectomía (extirpar el útero de
una mujer) de las cuales el 30% son Mínimamente invasivas y de estás el 11% son
robóticas. Se trata de un gran avance, Si tenemos en cuenta que hace cuatro
años con cirugía robótica solo se realizaban Con esta técnica el 1%.
• En el mundo existen alrededor
de 2000 robots de este género, cinco de los cuales Están en Latinoamérica (Colombia,
Brasil, México, Venezuela y argentina). Bogotá dc., mayo de 2010. Una
histerectomía (extirpación del útero de una mujer) se convirtió En la primera
cirugía robótica en el área de ginecología desarrollada en Colombia, explicó el
doctor Fernando Gómez, director del departamento de ginecología y obstetricia
de la clínica de MARLY. Asistidos por DA VINCI, el único robot de alta
tecnología médica de su género que existe en Colombia, El equipo de galenos de
la clínica de MARLY bajo la dirección del experto mundial de cirugía robótica En
ginecología, Arnoldo Advíncula de estados unidos, realizó con éxito esta
intervención quirúrgica.
En el área de la ginecología, DA
VINCI ha sido diseñado para realizar cirugía s de alta complejidad Ofreciendo
los más altos estándares de seguridad y eficiencia los tipo de cirugías que se
pueden Realizar con el robot son : histerectomía radical con resección de
nódulos linfáticos en casos de Cáncer de cérvix y de endometrio, recanalización
tubárica en casos de infertilidad, sacrocolpopexia
(fijación del fondo vaginal),
miomectomía (procedimiento quirúrgico efectuado para extirpar fibromas Del
útero sin afectar al útero), y cirugía compleja por endometriosis avanzada.
También para realizar
intervenciones quirúrgicas como uretrocistopexia (fijación quirúrgica de la Uretra),
endometriosis (limpieza quirúrgica tejido endometrial fuera del útero),
reconstrucción de Malformaciones uterinas, eliminación de tumores de ovario y
tratamiento del síndrome adherencial Pélvico (distorsión anatómica provocada
por adherencias pélvicas que pueden ser causa de Infertilidad y dolor pélvico).
Desde hace tres años el doctor
Luis Eduardo Cavelier, gerente de la Clínica de Marly de Bogotá, junto con
otros colegas de la entidad soñaban con traer a Da Vinci a Colombia. En todas
las conferencias y congresos a los que asistían en el exterior el tema siempre
era el mismo: la cirugía robótica y sus innumerables ventajas.
En el mundo sólo existen 2.000
robots Da Vinci y en Latinoamérica hay únicamente cinco: en Brasil,
Chile, México, Argentina y Venezuela. Su costo es extremadamente alto,
por eso es un gran logro que una clínica colombiana haya podido adquirirlo. Por
el momento, sólo cuatro cirujanos de la Marly están capacitados para realizar
intervenciones con la asistencia de esta máquina, que recibe su nombre en honor
a Leonardo da Vinci, quien en 1495 diseñó los primeros planos de un robot
humanoide.
En principio, este moderno
aparato será utilizado en operaciones de próstata, ginecológicas, intestinales
y bariátricas. Dentro de un tiempo, y cuando haya más médicos entrenados,
también se empleará en intervenciones pediátricas y del corazón. Julián Sotomayor,
uno de los cirujanos capacitados para manejar a Da Vinci, asegura emocionado
que se trata de una máquina muy especial, un avance extraordinario de la
ciencia, que debe manipularse con movimientos sutiles pues es demasiado
sensible.
Cavelier explica que las ventajas
de realizar una cirugía robótica son enormes. Por ejemplo, permite ver las
estructuras del organismo mucho más grandes y de esta forma los médicos tiene
más posibilidades de preservarlas, ya que a veces las arterias son tan
diminutas que se ven afectadas en la cirugía y esto puede, en algunos casos,
contribuir a que una persona que es operada de la próstata, por ejemplo,
después de la intervención quede con problemas de incontinencia urinaria o
impotencia.
Además, el paciente sangra menos,
se puede acceder más fácil a los tejidos, el postoperatorio no es tan doloroso
y se reducen las complicaciones y riesgos de desarrollar infecciones durante
este período. Manuel Rueda Salazar, director científico y gerente de Litomédica
(la entidad que junto con Marly participó en la compra del robot), explica que
las imágenes ampliadas y en tercera dimensión que proporciona Da Vinci también
contribuyen a eliminar los puntos ciegos durante la cirugía y a dar mayor
precisión y seguridad.
Sin embargo, se trata de una
operación sumamente costosa por el nivel de tecnología tan alto que se está
utilizando. Así que por ahora únicamente los pacientes con poder adquisitivo
tendrán la oportunidad de ser operados con este robot.